sábado, 30 de enero de 2010

Cuarto Domingo del Tiempo Ordinario


LA VOCACION DE LOS PROFETAS.

Después de proclamar su misión en la sinagoga de Nazaret, Jesús quiere poner manos a la obra e iniciar ahí, en la tierra que lo vio crecer, su tarea evangelizadora. Y al principio todo va bien, sus paisanos aprueban el mensaje y admiran la sabiduría de sus palabras; pero, segundos mas tarde, dudan y empiezan a murmurar: ¿No es este el hijo de José?. Jesús se percata de lo que hay en los corazones de sus oyentes y les dice: “Seguramente me diran aquel refran: “Médico , curate a ti mismo” y has aquí, en tu propia tierra, todos estos prodigios que hemos oído que has hecho en Cafarnaúm… Yo les aseguro que nadie es profeta en su tierra”. Una vez oídas estas palabras de Jesús, todos los que estaban en las sinagoga pasan de la duda o el desprecio, a la ira y la violencia: “Lo sacaron de la ciudad y lo llevaron hasta un precipicio de la montaña… para depeñarlo”.
Aquí es donde debemos preguntarnos: ¿por qué los profetas encuentran tanta hostilidad y persecución?
¿Por qué despiertan conciencias, cuando la mayoría hace lo posible por anesteciarlas?
¿Por qué desmienten, cuando los que gobiernan o tienen autoridad hacen creer que “las cosas estan bien así”?
¿Por qué al no tener posiciones o intereses personales que defender, aparecen escandalosamente libres?

Reynaldo Rodrigo Román Díaz.

domingo, 24 de enero de 2010

Tercer Domigo del Tiempo Ordinario


LA SALVACION ES PARA HOY.

Este pasaje del Evangelio siempre me recuerda el dia de mi ordenación cuando al momento de leer el Evangelio (que era proclamado en español y en otras lenguas indigenas de Chiapas), el obispo, no quiso que el pre-diácono leyera en español porque tenía que ser proclamado por un diácono. Recuerdo que al comenzar el canto de Aleluya, el padre verbita encargado de la liturgia me llama y me dice: “no tienes otra opción que ir frente al obispo y pedir la bendición para leer el evangelio porque no quiere que el pre-diácono lea el Evangelio”. Por lo que consternado por la improvisación no tuve mas remedio que levantarme y subir al estrado y pedir la bendición. Al comenzar a leer el Evangelio (que era el Prólogo de San Juan) ante unas 2 500 personas, me di cuenta lo impactante que fue ese momento, era la primera vez que toda esa gente reunida en el auditorio me veia revestido de diácono próximo a ordenarme sacerdote, la forma que en que las palabras iban fluyendo de mi boca y la forma en que las personas me veian en silencio hasta el término del Evangelio. Tanto fué el impacto que por unos momentos hubo un silencio en el auditorio y antes de que el obispo hablara, una ola de aplausos se se escucharon venir. Era el momento en que yo por primera vez me veía como Jesús enfrente de mi pueblo, el que me vio crecer. Y en cierta forma había pasado la prueba de fuego. Este pueblo me recibía como su hijo que habia regresado, despues de muchos años en el extranjero, a su pueblo a comenzar su ministerio. Ahora que estoy de regreso en mi pueblo de vacaciones, todavia, despues de casi cuatro años, muchos se acuerdan de ese momento impactante en mi vida y en la vida de los habitantes de Salto de Agua. (Se acuerdan ustedes de ese día?).

en el contexto del Evangelio, los pobres y los enfermos en tiempos de Jesús, eran receptores de puras malas noticias: “tiene que ir a empadronarse”, “hay que pagar este nuevo impuesto”, “ustedes no pueden entrar”, “la salvación no es para ustedes”.

Despúes de haber sido tentado en el desierto, Jesús fue a Nazareth, donde se había criado. Entró a la sinagoga e hizo lectura del pasaje del profeta Isaías: “El Espirítu del Señor está sobre mi, porque me ha ungido para llevar a los pobres la buena nueva, para anunciar la liberación a los cautivos y la curación a los ciegos, para dar libertad a los oprimidos y a proclamar el año de gracia del Señor”. Hasta aquí no hay novedad; este texto de Isaías ya era conocido por los que estaban ahí. La buena noticia no está en que Jesús recuerde este texto liberador, ni en una promesa de que Jesús a mediano o corto plazo, sino en que eso que anunció el profeta Isaías se cumple hoy: “Hoy mismo se ha cumplido este pasaje de la Escritura que acaban de oir”.

A lo largo de su ministerio, Jesús no hará otra cosa que anunciar la Buena Nueva a los pobres y decir de muchos modos que la salvación es para hoy: “Hoy , mañana y pasado tengo que continuar mi viaje” (Lc 13, 33). “Hoy ha llegado la salvación a esta casa” (Lc 19, 9). “Te aseguro que hoy estarás conmigo en el paraiso” (Lc 23, 43).

“No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”, dice el conocido refrán. El Evangelio nos recuerda que la salvación es para hoy y que los cristianos tenemos mucho que hacer: pongamos hoy en práctica lo que acabamos de oir.

Reynaldo R. Román Díaz. SVD





sábado, 16 de enero de 2010

Segundo Domingo del Tiempo Ordinario


El Señor te prefiere a ti


Comenzamos el tiempo ordinario, con el segundo domingo del tiempo ordinario. El domingo anterior, del bautismo del Señor hace de transición entre Navidad y este tiempo. Comenzamos así a recorrer la Vida Pública de Jesús, sus obras y sus dichos, y lo hacemos con uno de sus primeros signos: el milagro de las bodas de Caná, en el que transforma el agua en vino a petición de la Virgen María. Los milagros son signos, expresión de otra realidad, de la realidad misericordiosa de Dios.

Para entender mejor ese milagro y no reducirlo sólo a una solución puntual de un problema: la falta de vino, es preciso situarlo en el contexto de la primera lectura.

La fe en la Biblia se entiende como una relación personal con Dios, una relación de confianza, e incluso como una relación matrimonial.

El pueblo de Israel vuelve del destierro de Babilonia y se encuentra Jerusalén desolada, destruida; se sienten abandonados por Dios, en una situación lamentable de desesperanza. En esa situación el profeta les dice esta profecía en clave de relación esponsalicia con Dios: “Te pondrán un nombre nuevo... Serás corona en la mano del Señor y diadema real en la palma de tu Dios. Ya no te llamarán “abandonada”, ni a tu tierra “devastada”; a ti te llamarán “mi Favorita” y a tu tierra “Desposada”; porque el Señor te prefiere a ti... así te desposa el que te construyó...” ¡Qué aliento para un momento de desesperanza! Así es nuestra relación de fe con Dios: el Señor nos prefiere a nosotros.

Esta promesa esponsalicia la expresa así el profeta Oseas (Os 2, 16... 22): “La llevaré al desierto y le hablaré al corazón... y ella me responderá ahí como en los días de su juventud…


Te desposaré conmigo para siempre, te desposaré en justicia y en derecho, en amor y en ternura; te desposaré en fidelidad y tú conocerás al Señor”.


En el texto del Evangelio escuchamos como Jesús y María acuden a una boda en Caná de Galilea. Su presencia bendice todas las bodas y fiestas de amor.

María está pendiente de las necesidades y le dice a Jesús: “No tienen vino”.


Jesús, en su vida pública mantiene alejada a su Madre: “Todavía no ha llegado mi hora”; “mujer ¿qué tenemos que ver tu y yo?


Como intercesora se retira de la escena diciéndole a los mayordomos: “Haced lo que él os diga”.


Las tinajas de agua de las purificaciones de los judíos son llenadas de agua, que es transformada en vino, mejor que el anterior. Este signo tiene una relectura: se pasa de los antiguos ritos: las purificaciones de los judíos, al vino - quizá de la Nueva Alianza -. “El agua en vino transformada, o la insipidez en gracia, la debilidad en fortaleza, la tristeza en gozo, las lágrimas en júbilo, la frialdad en fuego. El agua es como la letra humana, el vino es la música divina. El agua es el esfuerzo humano, el vino es el poder de Dios. El agua es la ley del temor - “tinajas de piedra para las purificaciones de los judíos” -, el vino es la ley del amor”.


Esta relectura nos permite ver otro plano de interpretación en el contexto de boda de Dios con su pueblo de la primera lectura: en nuestra relación personal con Dios debemos dejar las purificaciones externas, los ritos inútiles, las devociones individualistas... para pasar a la relación del vino de la Nueva Alianza, que es la relación de la entrega generosa de la propia vida como signo de nuestra relación cultual con Dios; pasar del esfuerzo a la gracia, del temor al amor, del culto a la vida, de la esclavitud de las normas a la libertad del Espíritu.


Dios te prefiere a Ti no sólo como individuo, sino como persona integrada en un pueblo: el Pueblo de Dios. Un Pueblo: el cristiano, un Dios. El Espíritu se manifiesta en todos para el bien común. La paz que nos da Cristo, la paz que es Cristo, es reconciliación de todos con Dios y entre todos nosotros. Hoy pidamos juntos para que nuestra relación personal con Dios sea auténtica, que nos pongamos en sus manos.


Reynaldo R. Román Díaz.

jueves, 14 de enero de 2010

15 de Enero. Fiesta de San Arnold Janssen




Estimados cohermanos-as y amigos-as,

Mientras que en Chiapas se celebra el dia del Señor de Tila, en otras partes deMéxico, el dia del Señor de Esquipulas, o en Costa Rica, la peregrinación y Fiesta del Señor de Esquipulas en Nicoya, nosotros los Misioneros del Verbo Divino celebramos el dia de nuestro Santo Padre Fundador, Arnold Janssen. El representa para nosotros una inspiracion y modelo a imitar en nuestro trabajo misionero.
hoy es un dia para toda la familia Arnoldina (los Misioneros del Verbo Divino y las Siervas del Espiritu Santo y las siervas del Espiritu Santo de perpetua Adoración) celebramos y compartimos juntos la Eucaristia y encomendamos a su intercesión por las necesidades de nuestra labor misionera asi como tambien pedimos por todos nuestros amigos y bienhechores en el mundo por sus necesidades personales.

!Feliz dia de San Arnold Janssen!

Con Cariño,

Reynaldo Rodrigo Román Díaz. SVD


Arnold Janssen

(1837-1909)

Fundador de los Misioneros del Verbo Divino,

Siervas del Espiritu Santo,

Siervas del Espiritu Santo de Adoración Perpetua.

Arnoldo Janssen nació el 5 de noviembre de 1837 en Goch, una pequeña ciudad de la Baja Renania (Alemania). Segundo entre diez hermanos, aprendió de sus padres la dedicación al trabajo y una profunda religiosidad.

El 15 de agosto de 1861 fue ordenado sacerdote para la diócesis de Münster y fue asignado a enseñar ciencias naturales y matemáticas en la escuela secundaria de Bocholt, donde adquirió fama de maestro estricto pero justo. Por su profunda devoción al Sagrado Corazón de Jesús fue nombrado director diocesano del Apostolado de la Oración. Desde este apostolado, Arnoldo buscó abrirse también a cristianos de otras denominaciones.

Poco a poco creció su conciencia de las necesidades espirituales de la gente aún más allá de los límites de su propia diócesis, hasta convertirse en preocupación por la misión universal de la Iglesia. Decidió dedicar su vida a despertar en la iglesia alemana la conciencia de su responsabilidad misionera. Con este objetivo en mente, en 1873 renunció a su cargo docente y fundó «El pequeño mensajero del Corazón de Jesús». En esta revista mensual ofrecía noticias misionales y animaba a los católicos de lengua alemana a hacer más por las misiones.

Eran tiempos difíciles para la iglesia en Alemania. Bismark había desatado el «Kulturkampf» («batalla por la cultura»), que implicaba una serie de leyes anti-católicas, la expulsión de sacerdotes y religiosos y aún el encarcelamiento de varios obispos.

En esa situación caótica, Arnoldo Janssen sugirió que tal vez algunos de los sacerdotes expulsados podrían ser enviados a las misiones o ayudar en la preparación de misioneros. Poco a poco, y animado por el vicario apostólico de Hong Kong, Arnoldo fue descubriendo que era a él a quien Dios llamaba para esta difícil tarea. Muchos opinaban que no era el hombre indicado, o que los tiempos no estaban maduros. «El Señor desafía nuestra fe a realizar algo nuevo, precisamente cuando tantas cosas se están derrumbado en la Iglesia», fue la respuesta de Arnoldo.

Con el apoyo de varios obispos, Arnoldo inauguró la casa misional en Steyl (Holanda) y dio comienzo a la Congregación de los Misioneros del Verbo Divino. Ya el dos de marzo de 1879 partieron los dos primeros misioneros hacia China. Uno de ellos era José Freinademetz.

Consciente de la importancia de las publicaciones para atraer vocaciones y fondos, Arnoldo estableció la propia imprenta sólo cuatro meses después de inaugurada la casa. Miles de laicos generosos dedicaron tiempo y esfuerzos a la animación misional en los países de habla alemana distribuyendo las revistas de Steyl. De esta manera, la nueva congregación se desarrolló ya desde su inicio como comunidad de sacerdotes y hermanos.

Los voluntarios que ayudaron en la casa misional no sólo fueron hombres. Prácticamente desde el comienzo, un grupo de mujeres se puso al servicio de la comunidad. Su deseo era servir a la misión como religiosas. Este deseo, los años de fiel servicio, y la conciencia de la importancia de las mujeres en las misiones, llevaron a Arnoldo a fundar la congregación de las «Siervas del Espíritu Santo» el 8 de diciembre de 1889. Las primeras Hermanas partieron hacia Argentina en 1895.

En 1896, el P. Arnoldo eligió a algunas de las Hermanas para formar una rama de clausura, las «Siervas del Espíritu Santo de Adoración Perpetua». Su servicio a la misión sería la de rezar día y noche por la Iglesia y especialmente por las otras dos congregaciones misioneras, manteniendo un servicio ininterrumpido de adoración al Santísimo Sacramento.

Arnoldo murió el 15 de enero de 1909. Su vida fue una permanente búsqueda de la voluntad de Dios, de confianza en la providencia divina y de duro trabajo. Testimonio de la bendición divina sobre su obra es el ulterior desarrollo de la misma: más de 6.000 misioneros del Verbo Divino trabajan hoy en 63 países. Las misioneras Siervas del Espíritu Santo son más de 3.800 hermanas y más de 400 las Siervas del Espíritu Santo de Adoración Perpetua.


domingo, 10 de enero de 2010

El Bautismo del Señor.


EL BAUTISMO DEL SEÑOR.

En la liturgia hoy conmemoramos el "bautismo” de Nuestro Señor Jesucristo, celebrado por San Juan Bautista. En realidad, el Señor no tenía que ser bautizado porque nunca tuvo pecado. Se bautizó por la misma razón que cumplió con algunas otras observaciones legales judías que tampoco tenía la obligación de hacer. Vino a este mundo como hombre y quiso sujetarse a las leyes de Moisés, como lo hacían todos los Judíos, pero nada de esto le obligaba. Todas estas leyes eran las que regían al pueblo Israelita, el pueblo que Dios eligió para preparar la venida del Señor. Y Jesús cumplió con ellas para darnos un ejemplo de cómo debemos actuar nosotros, de cómo debemos cumplir con los mandamientos de nuestra fe.

Así que Juan bautizó a su Redentor. Tradicionalmente la Iglesia ha enseñado que al ser bautizado Nuestro Señor el Sacramento del Bautismo queda instituido como tal. Los primeros cristianos mostraban su deseo de ser seguidores del Señor siendo bautizados. Sabían, como lo sabemos nosotros, que en el Bautismo recibimos la gracia del Espíritu Santo y la fe. Por eso, durante la época de los apóstoles, se bautizaban familias enteras, desde el recién nacido hasta el más anciano. Ellos comprendían que el día de nuestro Bautismo es un día grande e importante para nosotros. Después del Bautismo nos hacemos hijos e hijas de Dios y nuestra herencia espiritual es el amor de Nuestro Padre que está en el cielo.

Por desgracia, muchas personas, quizás influenciados por amigos que no son Católicos o simplemente porque ignoran la importancia de este sacramento para los niños, no llevan a sus hijos e hijas a bautizar en los primeros días después de su nacimiento. Llevan a sus hijos a bautizar pensando más en la fiesta, el convite o en la ropa en vez de pensar en el sacramento en sí. Lo convierten en un acto social. Llevan al niño a la iglesia a bautizar pensando que, cómo somos Católicos, tiene que ser bautizado. No piensan en las responsabilidades que trae este sacramento para los padres y padrinos. Da verdadera pena ver algunos bautismos en los que hay tan poca fe alrededor.

El bautismo es el comienzo de nuestra misión profética. Desde el mismo momento en que se recibe este sacramento, el bautizado ya está comprometido a vivir una vida santa. Sus padres se comprometen a dar testimonio de su fe a su hijo para que, con los años, se convierta en un buen cristiano, evangelizando como lo hicieron los primeros cristianos, en nombre de Nuestro Señor Jesucristo. Al ser bautizados como hijos e hijas de Dios adquirimos la más alta dignidad. En el momento del bautismo, por la gracia del Espíritu Santo, inmediatamente se produce el milagro de un nuevo nacimiento. El agua bautismal es signo de la muerte al pecado y del renacimiento espiritual a la vida eterna con Cristo.

Nosotros mostraríamos un hermoso apostolado llevando a nuestros hijos a ser bautizados lo antes posible después de su nacimiento. Así enseñaríamos a nuestros familiares, amigos y demás miembros de nuestra propia comunidad, que los recién nacidos tienen el derecho de ser bautizados y de recibir la gracia, la fe y, lo más importante, la salvación eterna a través de una relación muy especial con Nuestro Señor.

Los padres y padrinos deben tener en cuenta que han recibido un mandato de Cristo. Desde el momento que llevan sus hijos a bautizar deben enseñarlos a vivir una vida sin mancha, a evangelizar con su propio ejemplo y a amar a los demás. A través de la Iglesia, Cristo mismo les dice a los padres y padrinos que deben ser sus testigos dentro de sus propias familias. Y esto lo dice claramente. Muchos se preguntarán ¿qué significa ser testigo de Cristo? Pues significa tener la misión de pregonar la fe que hemos recibido en el bautismo, significa llevar siempre a Dios por delante en el corazón propio, en la familia, en la escuela, en el trabajo, y sobre todo en la comunidad a la que pertenecemos. Significa olvidarnos de nosotros mismos, del “que dirán” y seguir a Cristo.

Aprendamos a vivir nuestra vida mostrando que somos testigos valientes de Cristo, llevando por doquier su mensaje de salvación.

Reynaldo R. Román Díaz.

martes, 5 de enero de 2010

6 de Enero. Celebración de los Santos Reyes Magos en México





EL DIA DE REYES.

Este día se recuerda la llegada de los Tres Reyes Magos a Belen para entregarle obsequios al Niño Jesús. Se cuenta de unos Magos vinieron de oriente buscando al nuevo rey que habría de nacer. Se asume que eran "sabios" o astrónomos, llamados en aquella época como "magos", porque venían siguiendo una estrella que presagiaba la llegada del nuevo rey. Como venían con regalos para el rey que habría de nacer, la tradición los describe como reyes bondadosos con presentes para todos, asignándole un nombre y rasgos específicos a cada uno:

Melchor: Un anciano blanco con barbas blancas. Su regalo para el niño Jesús fué oro, representando su naturaleza real.
Gaspar: Joven moreno. Su regalo fué el incienso, que representa la naturaleza divina de Jesús.
Baltasar: De raza negra. Su regalo a Jesús fué mirra, que representa su sufrimiento y muerte futura.

Es por eso que este día recordando los regalos que los Reyes Magos llevaron al Niño Jesús se acostumbra darle regalos a los niños durante ese día. En México, como en otros paises hispanos, los niños tienen la costumbre de hacer cartas a los Reyes Magos donde les expresan lo bien que se han portado durante el año, y así les indican los obsequios que quieren recibir el día de Reyes. Esta carta la ponen los niños junto con uno de sus zapatos, a un lado del nacimiento o portal. Ahora, según la sugerencia de los programas de television, sugieren a los niños atarla con un cordón a un globo y lanzarla a fin de que su carta llegue al cielo junto a los Reyes Magos. Durante la noche del 5 de Enero los niños esperan ansiosos sus regalos, pero será hasta la mañana del 6 de Enero cuando podrán descubrir cuáles son los regalos que los Reyes Magos les dejaron en el arbolito de Navidad o en el nacimiento.

En otras ciudades se acostumbra hacer un desfile de Reyes, en el cual muchos carros alegóricos desfilan adornados con muchos colores especialmente para los niños, con música, payasos, gente disfrazada y no pueden faltar los Tres Reyes Magos quienes que van regalándole obsequios o dulces a los niños.

También es una tradición cortar la "Rosca de Reyes", la "Rosca" es un pan en forma de anillo que es cubierto de azúcar y pedazos de fruta. En la "Rosca" se introducen pequeñas figuras de niño de plástico, el "monito". Si en tu pedazo de rosca hay un "monito", la tradición dice que estás obligado a invitar a tus amigos Atole y Tamales el día de la Candelaria.

A mi personalmente me gusta mucho esta tradición porque me llegan los recuerdos de mi infancia de cuando me dormía temprano y con la inquietud de despertar y encontrar los regalos que los reyes me habian traido. Era un momento de felicidad al abrir ojos y ver los regalos debajo de la cama o a un lado de la almohada.

Asi que cohermanos y amigos, aún queda tiempo para escribirle a los Reyes Magos, y a dormirse temprano porque la magia de la llegada de los Reyes a la casa es siempre impresionante. A lo mejor y despiertan con un regalo junto a su cama. Y después a partir la Rosca de Reyes con la familia, amigos o companeros de trabajo.

Con cariño,

Reynaldo Rodrigo Román Díaz.